martes, 5 de junio de 2012

Reflejos

Podríamos ser diferentes, pero no lo somos,
ni tu ni yo haríamos nada diferente en nuestras vidas
si nos dieran la oportunidad.

Somos inmaduros, incongruentes, y antes que nada, somos egoístas.
Queremos toda la atención de los demás; y si nos alaban tanto mejor;
deseamos ser amados; mucho más que amar, y queremos todo de inmediato
y sin palabras de por medio, para variar.

Necesitamos fama y dinero, conocimiento e información.
Pensamos a corto y a largo plazo como individuos y no como parejas, amigos o familia.
Cuando dices "te amo", dentro te preguntas si fue o es así...
Porque dudas de si te amas a ti mismo.
Cuando digo "te amo", no sé si jamás amaré a otro como me amo a mi misma...

Porque somos egoístas pasamos un tiempo solos,
y otro usando a los demás... física, económica o intelectualmente.

Quizá por eso nos tenemos, por eso tenemos esa relación,
con capacidad de ser destructiva y un pozo de vacío sin fin...
Para no lastimar a nadie más, para tratar de ver si logramos ser libres
junto a otra persona...
Para sentir que somos capaces de ser adultos convencionales...
Pero no lo somos, y jamás lo seremos,
porque podríamos ser diferentes, pero no lo somos,
y ninguno de los dos haría nada diferente con su vida
si le dieran la oportunidad.

No hay comentarios: